Esta semana estamos de enhorabuena ya que da comienzo oficialmente la primavera. A pesar de que en la Costa del Sol tenemos la fortuna de contar con buen tiempo prácticamente durante todo el año, la llegada de la primavera siempre llena a los malagueños de alegría.
La primavera para nosotros es sinónimo de más horas de luz y de temperaturas más altas, lo que significa que podemos disfrutar de más tiempo en el exterior haciendo lo que más nos gusta: pasear, ir de compras, tomar algo en terrazas… En definitiva, hacer vida en la calle.
Si tenemos que pensar en una calle bonita que visitar, la primera que nos viene a la mente, cómo no, es la famosísima Calle Larios ubicada en pleno centro de Málaga.
Ya en diciembre os hablábamos de ella y os contábamos lo increíble que lucía con su impresionante alumbrado navideños. Ahora, a pesar de no contar con estas bonitas luces, sigue destacando por su belleza, sus fantásticos edificios, su cuidado aspecto, sus flores y su alegría, así como por sus innumerables tiendas.
A pesar de ser conocida popularmente como Calle Larios, su nombre oficial es Calle Marqués de Larios, ya que fue nombrada en honor a Manuel Domingo Larios y Larios, II Marqués de Larios, quien se encargó de financiar su construcción.
La Calle Larios fue inaugurada en 1891 y a modo de curiosidad cabe decir que durante la Segunda República Española fue renombrada como Calle 14 de Abril, volviendo a llamarse Marqués de Larios tras la Guerra Civil.
Justo a su entrada en una rotonda entre la Alameda Principal, la Calle Larios y la Plaza de la Marina se erige el Monumento al Marqués de Larios, un conjunto escultórico que se inauguró en 1899 pero que con la llegada de la Segunda República y el cambio de nombre de la calle fue arrojado al mar en el puerto y suplantado por una estatua en honor al trabajo.
Al Igual que ocurrió con el nombre de la calle, tras la guerra la estatua del Marqués también se recuperó, se restauró y volvió a ser colocada.
Cómo ves esta es una calle que no sólo destaca por su encanto sino también por su historia, así que si tienes la suerte de dar la bienvenida a la primavera desde el Hotel Ángela, tu hotel en Fuengirola, ¿por qué no aprovechas un bonito día de sol para visitar Málaga y pasear por una de las vías más fascinantes de España?
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